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Cambió la vorágine de Buenos Aires por la tranquilidad de San José del Rincón y se reencontró con su inspiración. Sus originales muñecos se venden en todo el país
Vivía en una megalópolis como Buenos Aires, trabajando de algo que no le gustaba hasta que dijo basta y dio un volantazo a su vida. Se mudó a la pequeña localidad santafesina de San José del Rincón, a una casa hecha a su gusto y allí se reencontró con su inspiración. Gilda Rossi es una emprendedora que consiguió darle un cambio a su vida y desde hace dos años confecciona unos tiernos muñecos de tela irresistibles para grandes y chicos.
Bajo el nombre de Ferita, una amplia colección de simpáticos personajes son ideados y elaborados artesanalmente con mucha dedicación por su mentora. Con telas recicladas, extremada paciencia para dar en cada puntada una expresión a sus creaciones y el amor como elemento fundamental, sus muñecos transmiten su encanto y enamoran a cualquiera.
“Lo que me llevó a dar con este proyecto fueron las vueltas de la vida. Hice un cambio de perspectiva, recuperé mi esencia y lo que empezó como algo amateur hoy se vende y me da muchísima satisfacción”, confiesa la diseñadora en diálogo a punto biz.
Radicada desde hace tres años en San José del Rincón, un pueblo a 15 km de la capital santafesina, Gilda tuvo que dejar atrás su agitada vida en Buenos Aires. Trabajaba en una empresa en pleno microcentro de la ciudad de la furia e inmersa en la vorágine cotidiana, su instinto por el diseño y el arte parecían estar atenuados. Por esas cosas del destino pegó el volantazo y aterrizó donde la oportunidad de reencontrarse consigo misma fue un paso obligado.
“Ahora trabajo desde mi casa, que es un poco particular, tiene un gran techo de paja, muchos ventanales, animales y plantas. Veo el sol cuando entra a la mañana y los atardeceres son únicos en todo el año. Ahí en el altillo, casi a la altura de la copa de los árboles está mi taller”, describe la diseñadora que no cambia por nada esta nueva etapa que le toca transitar.
Aún sin local propio pero con miras a participar en ferias y volverse más visible, los Rossi originales se pueden obtener a través de su tienda Online: ferita.tiendanube.com o por su página de Facebook. Las ventas son hacia todo el país y no necesariamente son un regalo para los más chicos ya que también son considerados un objeto de decoración.
“Mucha gente adulta los elige y los disfruta al igual que un niño y eso me llena de orgullo. Al principio pensé que me iba costar desprenderme después de hacerlos con tanto esmero, pero al descubrir que van dirigido a personas que los saben apreciar se me hizo muy fácil soltarlos”, cierra Gilda emocionada por el alcance que toma su obra.
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