FEB
En Castel Gandolfo finalizó oficialmente la era del Papa, tras ocho años de pontificado. La Guardia Suiza cerró las puertas del palacio y ahora se inicia la pelea por la sucesión
El reloj marcó las 20 (hora de Roma) y comenzó a escucharse el sonido que marcó el final del papado de Benedicto XVI.
Ocho campanadas le indicaron a la Guardia Suiza que era el momento de cerrar las puertas del palacio de Castel Gandolfo, acción que representó a la perfección el epílogo de un ciclo para la Iglesia católica.
La elección del horario tuvo que ver con que Benedicto XVI solía finalizar su actividad diaria a las 20. Y los feligreses que estaban al tanto no dudaron en acercarse para seguir una ceremonia que en esta ocasión simbolizó un hecho histórico.
Tras las campanadas y el cierre del enorme pórtico de Castel Gandolfo, la Guardia Suiza terminó su servicio: la seguridad de Joseph Ratzinger estará desde ahora en manos de la gendarmería vaticana.
Link permanente a la noticia: