DIC
La imagen muestra a un cuidador despidiendo a su amigo, el último rinoceronte blanco macho en un centro de conservación en África
El 19 de marzo de 2018 Sudán, el último rinoceronte blanco macho del mundo, murió. El animal vivía en el centro de conservación de Ol Pejeta, en Kenya, África. Los momentos previos a su muerte, junto a quien era su cuidador, fueron capturados por una reportera gráfica de National Geographic. La foto es considerada la mejor de la década en la prestigiosa revista.
Ami Vitale, la fotógrafa, cuenta que ese día todo estaba en silencio, excepto el sonido de la lluvia, el gorjeo de un ave y el lamento Joseph Wachira y de los otros cuidadores del rinoceronte.
Wachira se había acercado a Sudán para darle una última acaricia detrás de su enorme oreja. El animal inclinó su cabeza para sentir al hombre que lo había cuidado con tanto amor. Eran dos amigos diciéndose adiós.
“Ver morir a una criatura, una que es la última de su clase, es algo que espero nunca volver a experimentar. Se sentía como ver nuestra propia desaparición. Espero que este momento desgarrador sea nuestro llamada de atención. Estos gigantes son parte de un mundo complejo creado durante millones de años, y su supervivencia está entrelazada con la nuestra”, dijo Vitale a National Geographic.
Y agregó: “Cuando nos vemos a nosotros mismos como parte de la naturaleza, entendemos que salvarla se trata realmente de hacerlo a nosotros mismos. Sudán me enseñó eso. Hoy hay un rayo de esperanza para el rinoceronte blanco del norte. Hoy solo quedan dos hembras en el mundo, pero existen planes para intentar la fertilización in vitro para criarlas”.
Durante la última década, los fotógrafos de National Geographic tomaron más de 20 millones de imágenes. Y esta en especial fue la que más conmovió a los lectores de la revista.
Link permanente a la noticia: