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El misterio se develó luego del increíble trabajo artesanal de pulido a mano realizado por la empresa Suarez, la misma que se encuentra avocada a la restauración del templo centenario de la Parroquia San Juan Bautista.
Tras tantos años expuesta en el centro del campanario del templo local, levantado por la gran ayuda de la comunidad en las primeras décadas del siglo XX, cumpliendo con su destino de llamar a la Celebración Eucarística –o anunciar alguna hecho extraordinario, con previa autorización del Obispo u párroco- día tras día, ahora se conoce que la campana de la parroquia repiqueteó por primera vez en tierras europeas.
Las fundiciones sobre la campana, 'Joh. Grassmayr' y un gran ‘1930’, revelan datos sobre su creación: Grassmayr fue la empresa que la fabricó y viene siguiendo esta tradición hace 400 años. “Todo comenzó en 1599, cuando Bartlme Grassmayr fue quien fundió en el tirol la primer campana”, indican en desde el portal Sobreaustria.com, en un repaso por el Museo de las Campanas de Innsbruk, Austria.
“Son más de 100 los países que han adquirido campanas Grassmayr”, aseguran desde el portal.
Resta conocer ahora cómo fue que la campana llegó al poblado de Jobson hace 100 años, cuál fue su recorrido, por quién fue encargada y quién la donó, si es que así lo fue. En esa tarea nos avocaremos de aquí en adelante para dar con las historias profundas que encarna nuestro más de un siglo de vida como comunidad.
Juan José Storti |Edición Vera|
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