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El segundo congreso federal de la Corriente Nacional de la Militancia se realizó en el Patio de la Madera, 48 horas antes del probable regreso a la actividad de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
Con una enfática defensa de las políticas del gobierno nacional de estos últimos 10 años y del modelo de país que lleva adelante la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, finalizó esta noche en Rosario el segundo congreso federal de la Corriente Nacional de la Militancia.
El encuentro se realizó en el Salón de Convenciones del Patio de la Madera . La jornada que contó con la participación de miles de militantes de la provincia de Santa Fe y de otros puntos del país, fue clausurado por el secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Carlos Zannini.
Alrededor de 4 mil personas colmaron las instalaciones del Patio de la Madera donde la militancia kirchnerista debatió "los desafíos del Proyecto Nacional a 30 años de la democracia“.
El segundo Congreso Federal de la Corriente Nacional de la Militancia, contó con la participación además de funcionarios del gobierno nacional, legisladores nacionales y provinciales.
Carlos Zaninni reafirmó hoy el compromiso del gobierno "a no cejar en esta lucha por manejar los intereses de todos y todas pensando en el bien común", al clausurar el encuentro.
El funcionario nacional fue el encargado del cierre del encuentro que protagonizaron más de 4 mil militantes en el Salón de Convenciones del Patio de la Madera de Rosario, en Caferatta y Santa Fe, de esta ciudad del sur de Rosario.
"Mi presencia acá no es para nada desinteresada. Vengo a este lugar a buscar predicadores que defiendan el gobierno de Cristina (Fernández de Kirchner), que difundan el gobierno de Cristina y que lo enriquezcan", les confesó a los militantes desde el primer instante de su discurso.
Tras esa introducción, Zaninni repasó rápidamente su trayectoria política y expresó su "orgullo" por integrar lo que consideró "los mejores gobiernos" desde el regreso de la democracia, definición que justificó haciendo referencia a los niveles de "inclusión social", al "crecimiento económico" y a que las "libertades de todos tipo (están) garantizadas", entre otras cosas.
Al analizar los 30 años desde el regreso de la democracia, el funcionario se detuvo en el estallido social del 2001 y lo señaló como un "accidente histórico que generó que llegara alguien "a querer cambiarlo todo, y a reconciliar a la política con la sociedad".
"Hemos avanzado mucho, pero todavía no hemos logrado que todos los políticos entendieran esto. La oposición no tiene que difamarnos, tiene que tratar de presentarse a la sociedad como más capaces que nosotros. No es denunciando mas, es trabajando mas por la gente", enfatizó.
En otro tramo de su discurso, se refirió a los desafíos de la militancia y sostuvo que entre ellos está "la tarea de hacerle comprender al compañero que no tenía trabajo y que andaba apenas en bicicleta" y que pudo mejorar su calidad de vida, "que siga creyendo en este proyecto político como la posibilidad de realizar sus sueños".
Además sostuvo que "el militante tiene que tener valores porque se llega a la política por volares, por vocación social de hacerse cargo de los problemas de todos, en nombre de todos y solucionarlos".
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