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La sede de la planta ensambladora de zapatillas deportivas Paquetá confirmó que el próximo 31 de diciembre cerrará sus puertas. La medida afectará a cerca de 600 empleados que se quedan sin su fuente de trabajo.
Tras 12 años funcionando en la localidad bonaerense de Chivilcoy, la empresa debió realizar un cronograma de suspensiones y retiros voluntarios debido a la acumulación de stock por la caída de ventas en el mercado interno y a la falta de inversiones para la producción.
El pasado martes se realizó una nueva audiencia que convocó a autoridades de los ministerios provinciales de Producción y Trabajo, representantes de la fábrica, dirigentes gremiales y delegados
Tras el encuentro se conoció que 178 personas ya no pertenecen a la firma de capitales brasileros, mientras que los 412 restantes deberán esperar a que se levante la conciliación obligatoria.
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