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El ministro de Economía, Angel Sciara, anunció esta mañana el envío a la Legislatura de un proyecto de ley para ampliar el financiamiento de la provincia a corto plazo por dos mil millones de pesos.
En rigor, por tratarse de actos que trascenderán el actual ejercicio, constituyen técnicamente endeudamiento público.
El funcionario habló de un “bache financiero” que se produjo esencialmente por una sobreejecución de obra pública, más el impacto de la masa salarial resultante de las paritarias de 2015 -y no incluidas en el actual presupuesto-, y otros ítems como el déficit previsional y hasta el costo adicional que demandó el proceso electoral.
El endeudamiento de corto plazo implica un menú de herramientas financieras como la emisión de letras, el pago con cheques diferidos y adelantos bancarios.
El Poder Ejecutivo ya contaba con un primer permiso concedido mediante la probación del presupuesto vigente, por 400 millones de pesos. Pero el monto resultó insuficiente para cerrar el año con las cuentas en orden.
Por eso, Sciara reclamó esta mañana que el proyecto sea aprobado “a la mayor brevedad posible”, y ante una consulta puntual de el Litoral, advirtió que si ello no es así, no estaría garantizado el pago de sueldos de los próximos meses.
- ¿Si el proyecto no se aprueba, corren riesgo los gastos corrientes como el pago de sueldos?
-Totalmente, claro que sí. Incluso el (sueldo) de los legisladores.
- ¿Entonces podemos decir que las cuentas no cierran si no se cuenta con estos dos mil millones adicionales?-insistió este diario.
-No, la cuentas están cerradas y estamos estimando otras alternativas para que las cuentas cierren. Esto, evidentemente, es una tranquilidad para que cualquier brecha financiera que pueda ocurrir de aquí en más no implique ningún tipo de contratiempo para hacer frente a los compromisos, particularmente de sueldos, que es lo que tenemos que garantizar.
Sin obstáculos
A su concepto referido a “evitar los contratiempos” futuros, Sciara le sumó el argumento de que lejos de comprometer a la próxima gestión de Miguel Lifschitz, este endeudamiento le permitirá, incluso, allanar el camino.
“Esto no va a afectar al próximo gobierno -sostuvo-. Precisamente, lo que trata de hacer es dejar las cuentas en orden para la administración siguiente que es una continuidad de nuestra gestión, a fin de que tenga una trayectoria sin obstáculos”
Es más, avanzada la conferencia de prensa, suavizó la advertencia con la que había azuzado al comienzo sobre el pago de sueldos; habló de que trabajan en un “plan B” en caso de que no resultara el propuesto, y dijo que los salarios “nunca” correrán riesgo.
- ¿La causa del déficit es sólo la sobrejecución de la obra pública o también incide, por ejemplo, el déficit previsional?-volvió a preguntar el Litoral.
-Se dan determinadas circunstancias conjuntas que se complementan y agudizan. Uno no puede adjudicarle una responsabilidad a determinado comportamiento. Hemos tenido durante este año, además y bienvenido sea este aumento de la obra pública, también otros gastos a los que hubo que hacerles frente. Las elecciones, por ejemplo, significaron para la provincia un gasto de entre 350 y 400 millones de pesos adicionales. Y obviamente que la explicación importante que pueden tener los desbalances de la economía provincial desde lo financiero está muy directamente relacionada con el déficit previsional que existe y es muy claro porque todos los meses tenemos que estar aportando a la Caja para que se puedan pagar las jubilaciones...
- Si los salarios mismos estarían en riesgo, ¿lo mismo pasaría con los proveedores?
-No no. los salarios nunca van a estar en riesgo. Obviamente que vamos a necesitar el aumento de partidas consiguiente para poder hacer frente como todos los años, al no estar (la paritaria) presupuestada. Entonces tenemos que recurrir a la Legislatura para incrementar el gasto en Personal, pero tenemos que tratar de que en ningún momento los salarios de los agentes públicos estén comprometidos.
-¿Qué herramientas se usaron de la autorización anterior de 400 millones?
- Adelantos bancarios y cheques de pago diferido que nos permiten tener una mayor flexibilidad en el pago de la obra pública. Incluso hemos adelantado el pago de obra pública a treinta días y hemos dado anticipos financieros. Hemos mejorado la fluidez en el manejo de la obra pública con los contratistas.
-¿Si la Legislatura dice que no, hay plan B?
- Estamos en eso. Ojalá que la Legislatura no diga que no.
- A mayo la provincia tenía un déficit de 930 millones de pesos. ¿Cómo cerrará el año?
- Es difícil saberlo. el déficit tiene mucho que ver con lo cíclico más que con lo estructural. Seguramente hoy estamos por encima de esos 930 de mayo y eso está muy influido por las circunstancias de pago que ocurren a lo largo del año. Cuando pagamos aguinaldo, obviamente el déficit aumenta. /Agenciafe/
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