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De las compañías eléctricas grandes es la que menos se ha endeudado. Era la única en el país que no tenía cuentas pendientes. Dejó de pagar este año. Versiones sobre convenios de pago.
La Empresa Provincial de la Energía debe 1.066 millones de pesos por la compra de su insumo más importante: la energía que produce el sector de la generación y que la EPE -luego de recibirla por el Sistema Interconectado Nacional- distribuye en toda la provincia.
La cifra mencionada se ha acumulado durante los últimos diez meses. En otras palabras, desde que comenzó 2015 la compañía estatal santafesina eligió seguir el mismo camino de sus pares, tanto públicas como privadas, que se han financiado con diferimientos en el pago de la energía que distribuyen.
El dato marca un cambio de fondo en la conducción de la compañía, que repercutirá en sus números y balances finales. Hasta aquí era la EPE la única de las llamadas empresas grandes que no tenían facturas pendientes con Cammesa.
La Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (Cammesa) acumula nada menos que 12 mil millones de pesos (ver aparte) y hoy Santa Fe queda en el cuarto lugar, entre las que más adeudan.
Si se analiza el peso de lo adeudado por la EPE respecto del rojo total con Cammesa, se verá que es equivalente a una doceava parte del total (1/12). En el mercado eléctrico argentino, la empresa santafesina por la energía que distribuye, por sus clientes, por la extensión de sus redes, por su grado de desarrollo, tiene un peso relativo equivalente de algo más de una décima parte (1/10).
Plan de pagos
De acuerdo con la información que pudo conocer El Litoral, la empresa se encuentra en las negociaciones previas para honrar esa deuda, mediante un plan de pagos (en cuotas).
Si bien la información no pudo ser confirmada oficialmente, todo indica que el convenio está cerca de ser rubricado.
En ese sentido, no debe olvidarse que la relación entre la EPE y Cammesa se inscribe en las tensas relaciones entre el gobierno santafesino y el Ministerio de Infraestructura de la Nación, que le reclama a las autoridades provinciales que congelen sus tarifas, como las demás distribuidoras.
En cuarto lugar
Las empresas eléctricas de Córdoba, Mendoza, Corrientes y Santa Fe encabezan la lista de morosas. Pero debe advertirse que los números de unas y otras (y su capacidades de pago) son muy diferentes.
La EPE santafesina es comparable a la Epec, cordobesa. Y mientras la primera debe algo más de mil millones, la segunda adeuda casi cinco veces más: muy pronto será de cinco mil millones el pasivo de la compañía mediterránea.
En cambio, Mendoza y Corrientes, con una capacidad de pago inferior, deben algo más que Santa Fe. La cuyana Edemsa tiene un rojo de 1.177 millones de pesos y la distribuidora estatal mesopotámica Dpec, 1.176 millones de pesos.
La deuda santafesina es comparable a la de una empresa privada bastante más chica, Edelap, que cubre La Plata, entre otras: 1.008 millones de pesos.
Santa Cruz, un par de años
También pesan las deudas de la estatal del Chaco, con 612 millones de pesos y la compañía de Catamarca, de 550 millones de pesos.
Otras empresas privadas (bajo la órbita del gobierno de la Provincia de Buenos Aires), Eden y Edea suman más de 700 millones.
La Cooperativa Eléctrica de Comodoro Rivadaviano ha pagado 282 millones de pesos y la provincia de Santa Cruz no puso un peso durante los últimos dos años: 205 millones de pesos.
Privilegios K para privatizadas
Quienes se han puesto al día con los pagos por la compra de energía en el nivel mayorista son las empresas privadas nacionales, Edenor y Edesur, que atienden a la ciudad de Buenos Aires y su Conurbano.
Suyos eran los pasivos más importantes hasta fines de 2014. Juntas llegaron a deberle a Cammesa más de 4.000 millones de pesos.
Las dos privatizadas nacionales fueron auxiliadas por la Casa Rosada con un fuerte subsidio a sus tarifas, situación que no se repite con el resto de las empresas -estatales o públicas- del interior del país.
Un informe del periodista Antonio Rossi, publicado por el sitio www.lapoliticaonline.com.ar, expone el rojo de 12 mil millones que quedará para el próximo gobierno y brinda detalles sobre la decisión del gobierno nacional de subsidiar, ya no a los usuarios, sino directamente a las empresas privadas.
“En la resolución 32 de la Secretaría de Energía, la administración kirchnerista le reconoció a las distribuidoras un fuerte aumento en sus ingresos que no fue afrontado por los usuarios, sino por el propio gobierno con un nuevo paquete de subsidios que se implementó a través de la Cammesa”, dice el informe.
Dicha norma “tuvo tres puntos salientes: el retorno de los subsidios para los usuarios de los countries y Puerto Madero, la ampliación de las compensaciones económicas para los hogares que ya tenían sus boletas bonificadas y la creación de una especie de ‘patacón eléctrico’ para que las distribuidoras puedan cancelar sus deudas con el Estado”.
“Con esa ayuda extraordinaria, Edenor y Edesur pudieron mejorar sus números, cancelar las deudas con el Estado y superar el riesgo de caer en situación de ‘patrimonio negativo’, que es una de las causales fijadas para la caída de la concesión”, sostiene la fuente mencionada.
Luis Rodrigo
politica@ellitoral.com
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